El sol brilla en el cielo mientras los visitantes llegan a Vilassar de Dalt, un encantador pueblo situado en la comarca del Maresme, rodeado por los municipios de Vilassar de Mar, Premià de Dalt, Cabrils y Òrrius. Con una rica historia y hermosos paisajes, Vilassar de Dalt ofrece una experiencia turística inolvidable.
Comenzamos nuestro recorrido en la zona de Can Boquet, hacia la montaña, donde se encuentran importantes yacimientos prehistóricos. Entre ellos, destaca el impresionante dolmen de la Roca d'en Toni, un megálito que se encuentra en el Parque de la Serralada Litoral. A los pies del Turó d'en Rumpons, esta antigua estructura es considerada el dolmen más conocido de la comarca del Maresme. Se dice que debe su nombre al pastor Toni Puig, antiguo propietario de los terrenos.
Continuamos nuestro viaje hacia la Cova de la Granota o Roca de la Granota, también ubicada en el Parque de la Serralada Litoral. Este abrigo natural está formado por una serie de grandes bolas graníticas amontonadas, creando un paisaje único y cautivador.
Después de sumergirnos en la historia prehistórica de Vilassar de Dalt, nos dirigimos hacia el centro del pueblo, donde nos encontramos con la imponente iglesia parroquial de Sant Genís. Con elementos del monumentalismo academicista y el gótico tardío, esta iglesia ha sido un punto de referencia desde el año 1118, y su arquitectura nos habla de siglos de historia y devoción.
Continuamos nuestro paseo hasta llegar a la Torre de Can Maians, una torre fortificada construida en el siglo XVI en 1551. Con su estructura robusta y su encanto medieval, esta torre nos transporta en el tiempo y nos permite imaginar la vida en tiempos pasados.
La Fornaca de Vilassar de Dalt es un lugar de interés arqueológico ubicado en el municipio de Vilassar de Dalt, en la comarca del Maresme. Este recinto alberga tres antiguos hornos romanos dedicados a la producción industrial de cerámica de gran formato, utilizada principalmente para la construcción, como ímbrex, tégulas y ladrillos, así como para la fabricación de ánforas y tinajas. Estos hornos son testigos silenciosos del pasado y nos transportan a la época romana, cuando la producción de cerámica era una actividad de vital importancia. En la Fornaca, los visitantes tienen la oportunidad de explorar y comprender el proceso de fabricación de estos materiales a gran escala.
Nos acercamos al imponente Castell de Vilassar, ubicado en la cima de un brazo de la Serralada Litoral. Esta fortaleza se alza majestuosamente, dividiendo los afluentes de los dos arroyos del pueblo y dejando un pronunciado desnivel en su lado oeste. Integrado en el núcleo urbano de la vila, el castillo es un testimonio vivo de la rica historia y el patrimonio arquitectónico de Vilassar de Dalt.
Antes de finalizar nuestra jornada de turismo, hacemos una parada en el Museu-Arxiu de Vilassar de Dalt, ubicado en la masía de Can Banús. Este museo y archivo tiene como objetivo conservar y difundir el patrimonio arqueológico, arquitectónico, histórico, natural y cultural de Vilassar de Dalt y su entorno. Aquí, los visitantes pueden sumergirse en la riqueza histórica y cultural de la región a través de exposiciones y colecciones únicas.
Con su fascinante patrimonio histórico, hermosos paisajes naturales y una cálida bienvenida, Vilassar de Dalt es un destino turístico que combina a la perfección la historia, la cultura y la belleza natural. Ya sea explorando los antiguos yacimientos prehistóricos, maravillándose con la arquitectura de la iglesia de Sant Genís o empapándose de la atmósfera medieval del Castell de Vilassar, cada rincón de este encantador pueblo ofrece una experiencia única.
Además de su patrimonio histórico y arquitectónico, Vilassar de Dalt también cuenta con una ubicación privilegiada cerca del mar Mediterráneo. Sus playas son ideales para relajarse bajo el sol, disfrutar del agua cristalina y practicar deportes acuáticos. Los visitantes pueden saborear deliciosos platos mediterráneos en los restaurantes locales, donde se fusionan los sabores tradicionales con toques modernos.
A medida que el día llega a su fin, los turistas pueden disfrutar de una velada tranquila paseando por las pintorescas calles del pueblo, admirando las fachadas coloridas y respirando el ambiente acogedor. Las tiendas locales ofrecen productos artesanales y souvenirs únicos para llevar a casa como recuerdo de esta experiencia inolvidable.
Con su rica historia, sus tesoros arquitectónicos y su entorno natural excepcional, Vilassar de Dalt es un destino que cautiva a todos los que lo visitan. Cada rincón del pueblo cuenta una historia, y cada visita deja una huella en el corazón de los turistas. Si estás buscando un día de turismo inolvidable, Vilassar de Dalt te espera con los brazos abiertos. ¡Ven y descubre su encanto único!