El sol se alza sobre la hermosa localidad de la Selva del Camp, un encantador municipio de Cataluña situado en la comarca del Baix Camp. El aire fresco de la mañana invita a los turistas a explorar sus maravillosos lugares históricos y arquitectónicos.
Comenzamos nuestro recorrido en el Raval de Sant Rafael, donde se encuentra el imponente Convento de Sant Rafael. Este convento del siglo XVII, con su espléndida iglesia de una sola nave, nos recibe con su estilo arquitectónico barroco. Su belleza y sobriedad nos transportan a épocas pasadas, mientras admiramos cada detalle de su fachada.
Continuamos nuestro paseo hacia la Plaza Portal d'Avall, donde se encuentra el antiguo Convento de Sant Agustí. Este convento, con su iglesia de estilo renacentista del siglo XVI, nos cautiva con su elegancia y serenidad. Nos detenemos un momento para admirar su imponente estructura y su ubicación privilegiada en el corazón de la plaza.
Caminamos hacia la encantadora Placeta de Sant Andreu, donde se erige la imponente iglesia de Sant Andreu de la Selva del Camp. Aunque inacabada, esta iglesia de grandes proporciones nos impresiona con su estilo renacentista. Su ubicación en la placeta y su majestuosidad captan nuestra atención, y nos imaginamos cómo podría haber sido si se hubiera completado.
Continuando nuestro viaje, nos dirigimos a la pintoresca Ctra. de la Selva a Vilallonga, donde se encuentra la ermita de Santa Maria de Paretdelgada. Este edificio religioso, que combina elementos góticos, renacentistas y del siglo XVIII, nos maravilla con su arquitectura única. Nos sumergimos en su atmósfera sagrada y disfrutamos de las vistas panorámicas de los alrededores.
Nos acercamos al Camí de Sant Pau, donde encontramos la Iglesia de Sant Pau. Esta iglesia, construida en el siglo XIV en estilo gótico tardío, destaca por su amplia nave rectangular. Nos maravillamos con su arquitectura y nos dejamos llevar por la serenidad que emana de su interior.
Continuando nuestra visita, nos dirigimos a la Plaza Mayor, donde se encuentra la Casa de la Vila de la Selva del Camp. Este edificio de época moderna, construido en el siglo XVI, nos recibe con su imponente presencia. Su estilo arquitectónico gótico-renacentista es una combinación fascinante que refleja la riqueza histórica y cultural de la región. Nos detenemos a admirar su fachada mientras imaginamos las decisiones que se tomaron dentro de sus muros a lo largo de los siglos.
Después, nos dirigimos al extremo norte del núcleo histórico, donde se alza majestuoso el Castell de la Selva. Este castillo, construido en el siglo XII, ha sido recientemente restaurado y rehabilitado para preservar su esplendor histórico. La ubicación en la Plaça de Sant Andreu nos ofrece una vista panorámica de la localidad y sus alrededores. Nos adentramos en sus muros para explorar las estancias y imaginarnos la vida en tiempos medievales.
Para completar nuestra experiencia en la Selva del Camp, nos dirigimos hacia El Tossal, una montaña de 504 metros que se encuentra en el municipio. Con su belleza natural y vistas impresionantes, nos invita a disfrutar de un poco de aire fresco y contemplar el paisaje circundante. A medida que ascendemos por los senderos, nos deleitamos con la rica flora y fauna que nos rodea, y aprovechamos la oportunidad para conectarnos con la naturaleza.