Elche de la Sierra, en la comarca de la Sierra del Segura, Albacete, es el mayor municipio de la zona, tanto en población como en extensión. Situado a 95 km de la capital provincial, su casco urbano, a 630 metros de altitud, combina calles empinadas con llanuras, adaptándose al relieve montañoso. Conocido por sus Alfombras de Serrín del Corpus Christi, declaradas de Interés Turístico Nacional, Elche de la Sierra ofrece un rico patrimonio, parajes naturales y un ambiente rural auténtico.
El Museo de las Alfombras de Serrín, ubicado en la calle Calderón de la Barca, es el primero en España dedicado a este arte efímero. Abierto desde 2022, muestra la historia y evolución de las alfombras que los vecinos crean cada año para el Corpus, con motivos religiosos y florales que se destruyen tras la procesión. Las visitas guiadas, reservadas previamente en la Oficina de Turismo, permiten conocer este legado cultural único de la Sierra del Segura.
El Mirador de Amílcar Barca, a 2 km del centro, es una zona recreativa con vistas espectaculares. Nombrado en honor al general cartaginés que pudo morir en la zona, cuenta con cinco mesas temáticas sobre las civilizaciones íbera, cartaginesa, romana, visigoda y árabe, además de tumbas visigodas y réplicas de estelas romanas. Desde aquí se divisan la aldea de Villares, Vicorto y la Peña de San Blas, un cerro emblemático ideal para amaneceres y atardeceres.
La Balsa del Pilar es un estanque y fuente de agua potable en el centro del pueblo, cerca del Parque de la Concordia. Rodeada de caños y vegetación, es un lugar tranquilo para descansar. Cerca, en el patio del Colegio del Cristo Crucificado, se encuentra “La Carrasca”, una encina milenaria de más de 700 años con 4,60 m de cuerda, que añade un toque natural e histórico al entorno urbano.
La Iglesia de Santa Quiteria, construida entre 1783 y 1788, es un templo neoclásico declarado Bien de Interés Cultural en 1992. De planta de cruz latina, destaca por sus dos torres, su cúpula y un órgano del siglo XVIII en funcionamiento. Sus capillas, con arcos de medio punto, y el retablo dedicado a Santa Quiteria son puntos fuertes. Las visitas guiadas, organizadas desde la Oficina de Turismo, muestran detalles como el mecanismo del órgano.
La Casa Consistorial, en la Plaza Ramón y Cajal, es un edificio del siglo XIX recientemente rehabilitado. Situada en la calle Mayor, el eje comercial del pueblo, esta plaza es el corazón del casco antiguo. A pocos pasos, la Plaza Vieja, con un pilar de agua potable, y calles como Olivica, con casas encaladas, llevan al barrio de La Puentecilla, donde el pasado y el presente se funden en un ambiente manchego.
El Lavadero Municipal, en la Calle Puentecilla, es un lugar de interés histórico restaurado en 2010. Con 75 zonas de lavado de granito y dos caños alimentados por el manantial de La Poza, es uno de los lavaderos más grandes de Castilla-La Mancha. Abierto 24 horas, aún lo usan algunas vecinas, y su tamaño refleja la importancia social que tuvo en el pasado. Otros parajes cercanos, como las fuentes del Alamillo, Carrasca y Hilario, y los cañones del río Segura (Puente Gallego, La Longuera, Almanzarán), ofrecen rutas de senderismo con aguas cristalinas y paisajes de gran belleza.
Lugares de interés cercanos: Peñarrubia, Villares, Vicorto, Liétor, Aýna, Yeste, Molinicos, Férez, Letur.
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