Bienvenidos a Pliego, un destino cautivador enclavado en la hermosa Comarca del Río Mula, donde la majestuosa Sierra Espuña abraza al tranquilo y serpenteante Río Mula. Este encantador municipio murciano ofrece a sus visitantes una combinación perfecta de naturaleza deslumbrante, historia milenaria y una rica tradición cultural.
Para aquellos que buscan sumergirse en la belleza natural, la Presa de Pliego es un punto de referencia imprescindible. Aquí, las aguas tranquilas se funden armoniosamente con el entorno montañoso, creando un escenario idílico para actividades al aire libre como senderismo, picnics y observación de aves.
Pero Pliego no solo es un paraíso natural; también es un tesoro histórico que deleita a los amantes del patrimonio. Desde el imponente Ayuntamiento de Pliego, con su arquitectura distintiva que refleja la historia del municipio, hasta la venerada Ermita de la Virgen de los Remedios, donde la devoción y la paz se entrelazan en un ambiente sereno y espiritual.
El legado arquitectónico de Pliego es igualmente impresionante. La Iglesia de Santiago Apóstol, con su exquisito estilo barroco, es una obra maestra que cautiva a los visitantes con su elegancia y esplendor. La icónica Torre del Reloj, que se alza majestuosamente sobre el pueblo, es un símbolo de la historia y la identidad de Pliego, mientras que los evocadores restos del Castillo de la Mota y la histórica Casa de la Tercia transportan a los viajeros a épocas pasadas de caballeros y nobles.
Para los aficionados a la arqueología, una visita al yacimiento de La Almoloya es imperdible. Este sitio de la Edad del Bronce revela los vestigios de antiguas civilizaciones y proporciona una fascinante visión de la vida cotidiana en tiempos remotos. Y para refrescarse y disfrutar de un momento de tranquilidad, la Fuente de los Caños ofrece un remanso de frescura y convivencia, donde los lugareños se reúnen para charlar y disfrutar del agua cristalina que brota de sus caños.
Pero la historia de Pliego no se detiene en el pasado distante; también se preserva y celebra en el presente. El Molino Harinero de Francisco, convertido en un cautivador museo, permite a los visitantes sumergirse en la historia molinera del pueblo y entender la importancia de esta actividad en la vida cotidiana de sus habitantes a lo largo de los siglos.
Además de su riqueza natural e histórica, Pliego también es un lugar donde la tradición y la comunidad florecen en cada rincón. Los visitantes tienen la oportunidad de sumergirse en la vida cotidiana del pueblo, participando en festivales locales, degustando la deliciosa gastronomía regional y entablando conversaciones con los amables lugareños, cuya calidez y hospitalidad hacen que cada visita sea inolvidable. En Pliego, el tiempo parece detenerse, permitiendo a los viajeros desconectar del ajetreo de la vida moderna y sumergirse en un mundo de belleza natural, historia fascinante y la alegría contagiosa de una comunidad vibrante y acogedora.