Nos adentramos en el municipio de Sant Fruitós de Bages, situado en la comarca del Bages, en Cataluña. Este encantador pueblo se encuentra a la derecha del río Llobregat, cerca del río d'Or, un afluente del primero, a solo 4 km al noreste de Manresa. Sant Fruitós de Bages ofrece un paisaje predominantemente llano, con algunas pequeñas elevaciones como la sierra de les Brucardes y el Montpeità.
El núcleo histórico del pueblo conserva su auténtica disposición medieval, con las casas agrupadas alrededor del templo formando una sagrera. Esta distribución nos transporta a tiempos pasados y nos permite imaginar cómo era la vida en estas antiguas calles.
Una visita obligada es la Abadía de Sant Benet de Bages, una obra declarada bien cultural de interés nacional. Esta antigua abadía benedictina es un testimonio de la arquitectura románica y se encuentra dentro del término municipal de Sant Fruitós de Bages. Con una construcción que data del siglo X, la Abadía de Sant Benet de Bages nos cautiva con su belleza e importancia histórica.
Nos adentramos en el municipio de Sant Fruitós de Bages, un lugar que alberga un tesoro arquitectónico único: el Cobert Agrícola de la Màquina de Batre. Este magnífico hangar, protegido como bien cultural de interés local, nos recibe con su imponente estructura de cerámica armada, que resalta a lo lejos. Al explorar este edificio, quedamos maravillados por su espectacular diseño y por la atención al detalle en cada uno de sus elementos de composición cerámicos. Su belleza y singularidad nos transportan a una época pasada, recordándonos la importancia de la maquinaria agrícola en esta región.
El Cobert Agrícola de la Màquina de Batre no solo es un ejemplo de arquitectura industrial, sino también un testimonio del patrimonio de Sant Fruitós de Bages. Representa la evolución de la industria agrícola en la zona y nos permite apreciar el legado de aquellos que trabajaron en ella.
La Iglesia de Sant Fruitós de Bages es otro edificio destacado en el municipio. Esta iglesia, protegida como bien cultural de interés local, presenta un estilo arquitectónico barroco y se encuentra en la Plaza de la Iglesia. Con una altitud de 249 m, este lugar sagrado ofrece una experiencia espiritual y un espacio de paz y recogimiento.
Sant Sebastià de les Brucardes es otra iglesia a tener en cuenta. Situada en el municipio de Sant Fruitós de Bages, esta iglesia rural construida en el siglo XVIII presenta un estilo arquitectónico popular. Esta pequeña capilla, ubicada en un entorno que antes era rural y ahora está urbanizado, muestra una estructura con un toque románico y tiene una apariencia encantadora.
No podemos olvidar Sant Jaume d'Olzinelles, una iglesia rural construida en el siglo XII en estilo románico. Situada en el término de Sant Fruitós de Bages, en el Bages, esta iglesia nos transporta a tiempos pasados y nos recuerda la riqueza histórica del pueblo.
Concluimos nuestro día de turismo en Sant Fruitós de Bages, impresionados por su patrimonio arquitectónico y su atmósfera auténtica. Este encantador municipio nos ha ofrecido una visión fascinante de su historia y cultura, y nos despedimos con la promesa de regresar en el futuro para seguir explorando sus encantos.