Nos adentramos en el municipio de Sant Joan Despí, ubicado en la comarca del Baix Llobregat, a la izquierda del río Llobregat. Sant Joan Despí nos recibe con su encanto característico y una rica historia que se remonta a milenios atrás.
Comenzamos nuestro día explorando los numerosos edificios modernistas que se levantan en el municipio, construidos a principios del siglo XX. Entre ellos, destacan dos obras de Josep Maria Jujol: la torre de la Creu y Can Negre, una antigua masía. Estos edificios son testigos del legado arquitectónico único de la zona.
Continuamos nuestro recorrido y descubrimos las huellas del pasado en el barrio de Torreblanca y les Begudes, donde se encuentran restos de cabañas y tumbas neolíticas. Estas evidencias arqueológicas nos transportan a tiempos remotos y nos permiten imaginar cómo era la vida en el pasado.
La Fàbrica de Cartró es un edificio industrial emblemático de Sant Joan Despí. Construido con ladrillo a la vista, se conserva tal como fue concebido originalmente. Es un testimonio de la historia industrial de la localidad y representa la importancia de esta actividad en el pasado.
Por otro lado, la iglesia de Sant Joan Baptista de Sant Joan Despí es el principal lugar de culto en el municipio. Su origen se remonta al siglo XI y ha sufrido continuas restauraciones a lo largo de los siglos hasta el siglo XX. La iglesia presenta una planta de cruz latina y tres ábsides, sin decoración externa. Su sencillez arquitectónica resalta la importancia de su función religiosa en la comunidad.
El gran pulmón verde de Sant Joan Despí es el Parc de la Fontsanta, uno de los parques más grandes de la zona de Barcelona. Ubicado al noroeste del municipio, entre los barrios de Les Planes y La TV3, este parque es el resultado de la urbanización de una riera que separaba ambos barrios. Aquí encontramos espacios naturales, áreas de recreación y un entorno tranquilo para disfrutar al aire libre.
Continuamos nuestro recorrido hacia el Barri Centre, donde se encuentra la Parròquia de Sant Joan Baptista y la pintoresca plaça de l'Església. En esta plaza también encontramos la capilla de la Mare de Déu del Bon Viatge, que añade un toque de espiritualidad al entorno.
Antes de finalizar nuestra visita, no podemos dejar de mencionar Cal Roldan, un edificio de arquitectura popular que data de 1910. Este emblemático edificio es un testimonio vivo de la historia de Sant Joan Despí y su evolución a lo largo de los años.
Concluimos nuestro día de turismo en Sant Joan Despí, impresionados por su patrimonio arquitectónico, su conexión con la historia y su entorno natural. Sant Joan Despí nos ha brindado una experiencia enriquecedora y nos despedimos con la promesa de regresar en el futuro para seguir descubriendo sus encantos.